El Pobre Inmigrante en los Ojos de “Evangelli Gaudium” (“La Alegría del Evangelio”)

Julian Jagudilla, OFM Justice and Peace, Resources

El papado del Papa Francisco ha dado nueva energía y entusiasmo a muchos en la Iglesia. La comunidad Franciscana se une con agrado al llamado del Papa a una nueva evangelización. En este espíritu, la Provincia del Santo Nombre ha preparado una serie de breves reflexiones sobre las declaraciones y escritos del Papa Francisco, en particular “Evangelii Gaudium.”

Las Caras de los Pobres y Desconocidos en medio de Nosotros
Ellen vino con una visa de turista a los Estados Unidos y se quedó. Ella trabaja ilegalmente porque necesita dinero para el tratamiento médico de su padre enfermo. Ella gana menos de lo mínimo pero no puede quejarse con temor de que su patrón la reporte con Inmigración. Ahora, su papá se está muriendo y ella se quiere ir a casa. Pero si ella se va, ella corre el riesgo de no poder regresar a los Estados Unidos.

Luisa vino con visa de novia con la promesa del que ahora es su esposo le iba a arreglar sus papeles para ser ciudadana. Desde que vino a los Estados Unidos hace 5 años, su esposo la ha maltratado físicamente. El esposo de Luisa le confisco su pasaporte y la ha amenazado con deportación si ella lo deja.

Con no oportunidades en su tierra, Ana María le paga mucho dinero al coyote (crimen organizado que pasa a personas para la frontera de los Estados Unidos) para que la pase a los Estados Unidos. Ya estando Ana María en Estados Unidos, ella fue llevada a una “vivienda segura” adonde ella fue abusada por sus traficantes. A cierto punto, los traficantes de Ana María le permitieron ir a la iglesia. Ella buscó refugio en la iglesia pero ella continua escondida de sus traficantes los cuales se la quieren llevar de vuelta.

Estos son los inmigrantes sin rostros y sin nombres que hemos encontrado en nuestras calles. Ellos toman el ferrocarril y buses con nosotros, ellos trabajan en tiendas y limpiezas de carros locales. Ellos son los inmigrantes que sufren y los desconocidos entre nosotros, quienes luchan por sobrevivir de la cual nosotros no sabemos nada.

“Evangelii Gaudium” y el Pobre inmigrante
Sabiendo de la sobrevivencia del inmigrante pobre, la Iglesia Católica de los Estados Unidos mantiene una póliza con brazos abiertos. La Iglesia está al frente de la campaña por una Reforma Inmigratoria Compresiva y fue hecha por medio de la creación de Justicia por los Inmigrantes, el cuerpo de campaña de los Obispos Católicos de los Estados Unidos.

En su última Exhortación, “Evangelii Gaudium” (“La Alegría del Evangelio”), el Papa Francisco nos dice que la misión de la Iglesia es evangelizar; eso es que “para hacer el Reino de Dios presente en nuestro mundo” hoy (sic). El insiste que la misión para evangelizar debe de incluir una dimensión social; sin ella “será un contaste riesgo de distorsión de la
autenticidad y del significado íntegro de la misión de la evangelización (par. 176).”

Centrado en la caridad, nuestra profesión de fe debe guiarnos a un compromiso con la sociedad “el desear, el buscar y proteger el bien del otro (par. 178).” El Papa nos anima a todos los Cristianos para que “renovemos nuestro encuentro personal con Dios,” un encuentro que nos alimente y nos autentique nuestra fe por medio de la acción (par. 5). Es muy esencial, que nosotros estemos llamados a estar en solidaridad con los pobres del mundo. La exhortación papal no solo deja afuera explícitamente al inmigrante pero cuando habla del pobre que tiene “un sitio especial para las personas de Dios,” incluye al inmigrante. “El corazón de Dios tiene un sitio especial para el pobre, tanto fue que el ‘se hizo pobre’ (2 Cor. 8:9), (par. 197).” Claramente, hay un sitio especial en Dios para Ellen, Luisa, Ana María y muchos sin contar, otros sin rostros e inmigrantes sin nombres.

El Papa dice enérgicamente, “la Iglesia ha hecho una opción para el pobre que es entendida como ‘forma especial principalmente en el ejercicio de caridad Cristiana’….ellos tienen mucho que enseñarnos. Necesitamos nosotros dejarnos evangelizarnos por ellos. Nosotros estamos llamados a encontrar a Cristo en ellos, a levantar nuestras voces a su rescate, pero también a ser sus amigos, a escucharlos, hablar por ellos y abrazar el misterio de la sabiduría que Dios desea compartir con nosotros por medio de ellos (198).”

Estas son palabras poderosas que ayuda al Centro Migrante de la Iglesia de San Francisco de Asís en la Ciudad de Nueva York vea su visión y misión mientras ellos buscan asistencia para todos los inmigrantes. Por el Centro Migrante, como el más grande de la comunidad Franciscana y Cristiana, este compromiso le da vida a la palabra “necesitamos dejar que nos evangelicen ellos…prestar nuestras voces para su causa,” un compromiso que abre los corazones y mentes al misterio de la presencia de Dios en ellos, el Dios que camina con ellos en su lucha de sobrevivencia y el Dios que llora con ellos cuando son abusados, oprimidos y explotados.

Traducido por Sandra Toala, Wilmington, Del.